Frases de Roger Ebert

Frases de Roger Ebert (1942-2013) Autor, periodista, historiador de cine, crítico cinematográfico, guionista estadounidense.

Ninguna buena película es demasiado larga y ninguna película mala es lo suficientemente corta

El arte es lo más cerca que podemos estar de entender realmente cómo se siente alguien extraño

Vivimos en una caja de espacio y tiempo. Las películas son ventanas en sus paredes. Ellas nos permiten ingresar en otras mentes, no sólo en el sentido de poder identificarnos con otros personajes, aunque eso es parte importante del asunto, sino también al ver el mundo del modo que otra persona lo ve.

Siempre estarán aquellos que aman las películas viejas. Conozco adolescentes que están extremadamente bien informados sobre los clásicos. Pero es cierto que muchos de los aficionados al cine ahora dicen que no les gustan las películas en blanco y negro. En mi opinión, se están perdiendo gran parte del misterio y la belleza del cine. El blanco y negro es una elección artística, un formato que tiene sus fortalezas y sus tradiciones, especialmente en el uso de la luz y las sombras. Evidentemente cualquiera tiene el derecho de que no le gusten, pero no es algo de lo que estar orgulloso, ya que, francamente, los deja como analfabetos cinematográficos.

Me parece que hay dos enfoques básicos para cualquier tipo de película de comedia. Para simplificar la cuestión, a uno le llamaremos el del ‘sombrero divertido’ y al otro el de la ‘lógica divertida’. La diferencia es básica: en el primero, se supone que nos cause gracia que el personaje esté utilizando un sombrero divertido; en el otro, la gracia está en las razones que tiene para ponerse ese sombrero. Ya deben haber adivinado que prefiero siempre lo segundo.

En el siglo pasado los cines eran habitualmente, sobre todo en pequeños pueblos y ciudades, la obra arquitectónica más grandiosa, exceptuando tal vez únicamente una iglesia o un palacio de justicia. Eran los que proveían de un escenario para nuestros sueños.

La mayoría de las buenas películas se tratan sobre un estilo, un tono y una visión de sus realizadores. Un buen director va a tocar una fibra sensible en tu imaginación y te va a dar ganas de conocer otros de sus trabajos. Los directores se convierten en algo así como amigos.

Cuando el personaje de una película realmente funciona, nosotros nos convertimos en ese personaje. Eso es lo que ofrecen las películas: escapismo hacia una vida que no es la nuestra.

Ningún director de cine tiene tanto poder como el director de películas animadas. Éste es liberado de las reglas del universo físico y de las limitaciones de los actores humanos, y puede contar cualquier historia que su mente pueda concebir.

El asunto no es evitar ver todas las películas estúpidas, sino evitar ser un espectador estúpido. Es una tarea difícil la de separar las buenas películas estúpidas de las malas.

La única responsabilidad de un guión es hacer de la película la mejor posible. Los que creen que el guión adaptado de un cómic o de una novela debe ser ‘fiel’ al original, parece que vieran una adaptación como si fuera un matrimonio. Los fanáticos de las novelas o los cómics se enojan por cualquier cambio, pero una adaptación puede significar también una mejora.

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